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Noticia del Boletín 93 – Año 3, del 12 de enero de 2020

El pasado 4 de Enero tuvo lugar uno de los acontecimientos más especiales del año, la Cabalgata de Reyes de Villa de Vallecas, en la que, como los años anteriores, participó nuestra Parroquia.

Este año, a diferencia del año pasado, íbamos vestidos de llamas, y nuestra misión no era otra más que anunciar el Nacimiento de Jesús con el fuego del Espíritu; aunque no sólo íbamos disfrazados, sino que también éramos los encargados de llevar la estrella que guiaba a sus Majestades. Una de las participantes de la cabalgata nos comparte cómo la experiencia la transportaba a la llegada de Jesús a Jerusalén, donde todo el mundo le aclamaba. Y al mismo tiempo, ¡qué suerte la nuestra!, que podemos celebrar nuestra fe, mientras que hay hermanos, cristianos perseguidos, que tienen que vivir su fe en secreto.

Además, los Reyes Magos también se pasaron por la Parroquia expresamente para visitar a los niños y niñas de la Cañada Real, para poderles entregar en persona los regalos que habían recopilado con la ayuda de los voluntarios de nuestra familia.

En resumen, fue un día mágico en la que se repartieron multitud de caramelos, muchos regalos y un montón de ilusión, tanto en niños como mayores. ¡Gracias a los Reyes Magos, a la parroquia y a Dios por haber podido disfrutar de este día!

Noticia del Boletín 92 – Año 3, del 5 de enero de 2020

Esta Navidad hemos celebrado el nacimiento de Jesús en nuestra parroquia. Y su nacimiento se ha hecho notar, uniéndonos una vez más, y acercándonos como comunidad.

Desde la bendición del árbol de Navidad, en la que cada uno fue acercándose a poner su pequeña familia como ofrenda a los pies, ofreciéndonos para acogerle. Un árbol que se fue volviendo más multicolor y bonito cuanto más familia eramos.

Y a lo largo de estas últimas semanas de Adviento se han ido sucediendo estas señales de familia. Como en la campaña de nuestra Cáritas parroquial, donde la participación ha sido superior a la del año pasado en más de 1000€. Lo mismo sucedió con la campaña de alimentos, donde se pudieron llenar varias bolsas de comida para aquellos de nuestra familia que lo pudiesen necesitar, gracias a las grandes cantidades que se recogieron.

Otro tanto sucedió con las cartas apadrinadas de Cañada, donde el aluvión de gente que quería participar en la ilusión de estos niños hizo que las cartas se acabasen rápidamente.

Por otra parte la alegría de ser familia se mostró el 21 de diciembre, siendo Sembradores de estrellas, donde no solo compartimos nuestra alegría de puertas para adentro, sino que la alegría por el nacimiento de Jesús se comparte con nuestros hermanos del barrio, aunque no sepan que hay una familia de la que forman parte rezando por ellos.

Como broche final de este compartir, hemos podido disfrutar de la cena de Nochebuena, alegremente, poniendo al niño en el centro, y acogiéndole después en la misa del Gallo.

Todo esto muestra que seguimos creciendo, y lo que supone ser una familia con todos y para todos.

Noticia del Boletín 91 – Año 3, del 29 de diciembre de 2019

Después de tres semanas de Adviento, y con el pesebre ya preparado para recibir al niño Jesús, el 21 de diciembre tuvo lugar en nuestra parroquia la vigilia misionera, orquestada por el grupo de misión.

En ella, se invitaba a nuestros vecinos del barrio a entrar al templo, a rezar ante el Santísimo expuesto. Desde el primer momento se les acogía en la entrada, invitándoles a acercarse al altar, donde alguien les esperaba para acompañarles, rezando por ellos.

Fue una experiencia enriquecedora tanto para el grupo de misión como para todas las personas que se acercaron a la adoración, donde pudimos comprobar que el Señor no deja de sorprender y rompernos los esquemas. Estamos seguros de que seguirá habiendo más ocasiones como esta en el futuro para abrir las puertas de nuestra parroquia y de nuestra familia a todos nuestros vecinos, unidos en Cristo.

Noticia del Boletín 90 – Año 3, del 22 de diciembre de 2019

El pasado fin de semana 40 personas de la Parroquia acompañadas por Rubén, nuestro párroco tuvimos oportunidad de participar en un retiro muy especial.

Durante 2 días, que por su intensidad nos han parecido muchos más, nos hemos conocido entre nosotros. Hemos descubierto la riqueza interior de personas que llevamos mucho tiempo viendo en la Parroquia o en el barrio, pero que apenas conocíamos. También hemos conocido a otras personas que acaban de incorporarse a nuestra familia y que sin duda nos van a enriquecer con su presencia.

Durante las Eucaristías y en las Adoraciones el Espíritu Santo se ha hecho presente con una fuerza que nos ha conmovido profundamente, ha habido silencios que nos han permitido escuchar y sentir aquello que Jesús espera de nosotros y oraciones en las que hemos abierto nuestro corazón a Dios y a nuestros hermanos.

El broche de oro de este retiro lo puso la visita al convento de Godella, donde nos recibió nuestra hermana Carla. Es difícil para alguien que no lo haya vivido imaginar la alegría y la Paz interior que transmiten las hermanas de Iesu Communio. Tuvimos oportunidad de hablar con ellas y escuchar sus testimonios.

Regresamos a Madrid con energías renovadas y nuevos deseos de acercarnos cada vez más a Jesús.

Tras esta descriptiva experiencia de una hermana sobre el retiro de los días 14 y 15 de este mes , podemos concluir que no solo ha sido un refuerzo y apoyo en su fe, sino también un impulso a abrazar a Jesús junto a unos hermanos que van siendo un poco más cercanos.

Noticia del Boletín 89 – Año 3, del 15 de diciembre de 2019

La costumbre de adornar un árbol para celebrar la Navidad comienza, nada más y nada menos, que en el S.VIII, cuando el obispo San Bonifacio, cerca de la fi esta del Nacimiento del Señor, vistió un abeto con luces, durante la evangelización de los pueblos de Centroeuropa que adoraban a los árboles en sus creencias paganas. Con este gesto, el santo misionero quiso dar a entender que Jesús es la verdadera Luz del mundo; una Luz que, como la hoja perenne del árbol, no pasa nunca y es para todos y para siempre.

San Bonifacio colocó también manzanas en recuerdo del pecado original vencido por el árbol de la cruz de Jesús. Hoy colocamos bolas como símbolo de los frutos de esta victoria de Jesús: nosotros mismos somos ese fruto precioso que ha brotado de Cristo, que es el Árbol de la vida.

EL PRÓXIMO DOMINGO 22 DE DICIEMBRE, EN LA EUCARISTÍA DE 11.30, inauguraremos nuestro árbol de Navidad, colocado en el Templo junto a la puerta de la sacristía. A lo largo de esta semana podéis traer vuestras bolas (una por familia), elaboradas por vosotros mismos, poniendo en ellas fotos, nombres, intenciones… para que toda nuestra Familia de Santa Eugenia quede refl ejada en este árbol, coronado por la imagen de la Sagrada Familia de Nazaret.

Todos unidos en Jesús, perenne árbol de Vida, Luz del mundo, del que se regala la salvación ayer, hoy y siempre.

Noticia del Boletín 88 – Año 3, del 8 de diciembre de 2019

En el barrio están viviendo tres hermanas de la Congregación religiosa de Santa Ana. Son Teresa, Esperanza y la superiora, Pilar. Llevan desde 1977 sirviendo a nuestro barrio y a la parroquia de San Juan de Dios. En 2016 cambiaron su tarea apostólica, es decir, lo que hacen y a lo que se dedican. Eligieron como zona de residencia y actuación nuestro barrio por estar situado en una de las partes más débiles de Madrid en la que hay gente necesitada, sin trabajo, etc.

Su labor dentro de la congregación es la de servir a los más necesitados, siendo su carisma el de la caridad universal vivida desde la hospitalidad. En nuestro barrio se centra en dos puntos esenciales:

• Atender el proyecto de acogida de mujeres en situación de vulnerabilidad con menores. Es un proyecto vivido en casa desde la acogida, acompañándolas hasta ayudarlas a normalizar su vida a fin de que sean capaces de integrarse en la sociedad.
• Esperanza colabora en la labor de alfabetización en la Cañada Real dos días por semana. Aparte, acude también a Apoyo escolar en la parroquia. Teresa aporta su granito de arena dando acompañamiento a las familias de la Cañada y también ayuda a ancianos un día por semana. Pilar trabaja por las mañanas en la Conferencia Nacional de Religiosos y también participa en el Consejo Pastoral de la parroquia. Además, acompaña a otras mujeres de acogida en el barrio.

Noticia del Boletín 87 – Año 3, del 1 de diciembre de 2019

Este pasado fin de semana se llevaron a cabo, como viene siendo tradición por estas fechas, las convivencias de jóvenes, en las cuales se tocaron varios temas tales como las bienaventuranzas y la esperanza, entre otros.

Las convivencias comenzaron el viernes con una oración introductoria que se inició con la lectura de un fragmento del Génesis y en la que también se formuló la siguiente pregunta: ¿Con quién te identificas más, con María, con Marta o con Lázaro?

Al día siguiente, el sábado por la mañana, la dinámica estuvo centrada en las bienaventuranzas y en cómo Jesús se hace pobre para que nosotros seamos ricos. Ya por la tarde se trató el tema de la esperanza en el corazón y cómo ciertos factores nos alejan de ella, así como de Jesús. La segunda parte consistió en un Cinefórum y la película elegida fue “La canción de mi padre”, de la cual posteriormente se comentaron los aspectos más a tener en cuenta. El día finalizó con una emotiva adoración en la que Dios se hizo presente para impedir que se perdiese la esperanza.

El domingo comenzó con una dinámica en la cual había que encontrar a Jesús en diferentes aspectos de la vida cristiana, tales como la oración o el perdón, entre otros. Para acabar las convivencias se celebró, como no podía ser de otro modo, la eucaristía.

En conclusión, estas convivencias tan especiales han sido una inyección de esperanza y una buena forma de encontrar a Jesús vivo en nuestra vida. Y como no podía ser mejor pudimos poner broche a este fin de semana con el maravilloso concierto y adoración de Athenas, donde pudimos sentir a Dios muy cerca junto a nuestros hermanos que vinieron para disfrutar este momentazo junto a la familia de Santa Eugenia.

Noticia del Boletín 86 – Año 3, del 24 de noviembre de 2019

El fin de semana pasado tuvo lugar la convivencia del grupo Preas de nuestra parroquia. Como todos los años por estas fechas, nuestros hermanos pequeños pasaron un fin de semana fantástico, alejándose de lo material para poder centrarse en lo verdaderamente importante, en lo que cada uno de nosotros llevamos por dentro.

“El viaje al corazón” era el tema principal de las convivencias, un título con el que se pretendía englobar todos los pasos que tenemos que dar para intentar acercarnos un poco más a nuestro corazón, para aprender a escuchar lo que nos dicen nuestras emociones. Entenderlas y no dejarlas de lado o barrerlas debajo de la alfombra como muchas veces estamos tentados a hacer y así llegar al núcleo del corazón, donde está Dios. Llegar a Él es nuestra meta.

Este viaje al corazón empezó con una bonita oración el viernes por la noche, el primer momento para pararse de verdad y empezar a recibir todo lo que el Señor les tenía preparado para el fin de semana. El día siguiente comenzaron reuniendo todo lo necesario antes de empezar un viaje tan importante, como por ejemplo preparar el equipaje o contratar un seguro, que en este camino no consistía más que en dejar todos nuestros problemas en las manos del Señor y en su perdón. Después de conseguir todo lo necesario para empezar el viaje, ya con el billete en mano, solo quedaba comenzar el viaje. Un viaje que no es fácil ni corto pero que tiene un destino claro: el centro de nuestro corazón. En la noche del sábado nos encontramos con el Señor en persona en una oración que acabó en adoración del Santísimo.

El domingo, después del intenso viaje repleto de emociones que había supuesto el finde, se puso el broche final a las convivencias con la celebración de la Eucaristía. Como siempre una experiencia inolvidable.

Las convivencias de Preas, al igual que las del resto de grupos de nuestra familia, son siempre una bonita oportunidad para rezar por nuestros hermanos. Un regalo que año tras año tenemos la suerte de seguir disfrutando.

Noticia del Boletín 85 – Año 3, del 17 de noviembre de 2019

“Permanecer juntos fue la condición que puso Jesús a los apóstoles en Pentecostés, para acoger el don del Espíritu Santo, y así comenzó la misión de la Iglesia en el mundo”.

Así lo dijo el papa Benedicto XVI en Roma en 2010 y así lo hizo nuestra Familia de Santa Eugenia para acoger al Espíritu en las Confirmaciones que tuvieron lugar el pasado sábado.

Tras varios años de espera en nuestra casa, diecisiete personas, la mayoría jóvenes y otros no tan jóvenes, llevaban mucho tiempo preparándose para recibir el sacramento de la Confirmación, y decidieron dar este paso tan importante en su vida como cristianos. Y no sólo eso, sino que la ceremonia, presidida por nuestro vicario Juan Pedro, incluyó también los sacramentos del Bautizo y la Primera Comunión para dos de los confirmandos, haciendo el evento incluso más especial. Así, toda nuestra Familia acudió al evento a acompañar a Paula, Sonia, Beatriz, Aaron, Elena, Sandra, Ruth, Natalia, Ángela, Eduardo, Riánsares, Elena, Pablo, Rodrigo, Margarita, Diana y Luis, al momento de sus vidas en que, convencidos y con toda la fuerza del Espíritu Santo, entonaron un “AQUÍ ESTOY”.

Ahora toca simplemente hacer lo que Jesús nos mandó: permanecer juntos, en el amor, y con la ayuda del Espíritu, para que sigamos viendo más Confirmaciones.

Noticia del Boletín 84 – Año 3, del 10 de noviembre de 2019

Definiría estas convivencias como una toma de aire para los que van a recibir su Confirmación. Durante nuestro día a día estamos rodeados de ruido, y un montón de luces que nos distraen y mantienen nuestra mente y nuestro corazón ocupados en hacer mil y una cosas. Por eso a veces es necesario parar y sencillamente tomar aire, y para eso han sido estas convivencias. El momento que viene no es cualquier cosa y para poder disfrutarlo hay que separarnos de todo ese ruido y luces y hacerle el hueco que merece a Dios. Él está siempre presente en nuestra vida pero no siempre lo vemos. Ellos piensan que no están preparados, pero la realidad es que es Dios quien va a prepararles en la confirmación, Él les llama a cada uno por su nombre. Pero quién mejor que ellos para definir estas convivencias, ellos las resumen con estas palabras:

Una sorpresa inesperada y especial

Paz y agradecimiento

Hágase en mí

El turista viaja, el senderista anda y el peregrino BUSCA.

Hay que seguir buscando, confiar y dejarse sorprender.

Bendecida

Unidad y oración

EnardecedOras

Renovadoras

El que busca encuentra

Un nuevo comienzo

Bendeciré tu nombre por siempre, Dios mío, mi rey