CONVIVENCIAS DE COMUNIÓN

Noticia del Boletín 28 – Año 1, del 29 de abril de 2018

El pasado fin de semana, los niños que próximamente recibirán el Sacramento de la Comunión, han podido disfrutar de unas bonitas convivencias. Estas se llevaron a cabo en Majadahonda, en el Albergue María Auxiliadora. Para todos ha sido una experiencia muy importante, ya que han sido las primeras realizadas con los más pequeños de nuestra comunidad de Santa Eugenia.

A lo largo de las convivencias han podido acercarse más a Jesús, y han conocido la gran maravilla que es su amistad. Para ello se han realizado diferentes juegos, dinámicas y oraciones.

Nada más llegar, el sábado por la mañana, se realizaron juegos de presentación y una ghymkana con diferentes juegos donde se trabajaba la confianza y la AMISTAD, tema que ha sido central en la convivencia.  Y para entender mucho mejor la amistad del Señor, se celebró la Eucaristía antes de comer. Por la tarde se hicieron cortometrajes formados por ellos y un videofórum. Después de cenar hicieron una oración donde pudieron experimentar el gran regalo que el Señor nos da a través de su amistad. Para finalizar la noche se llevó a cabo el juego nocturno, donde los niños tenían que buscar las semillas para plantarlas en la maceta que se les había dado anteriormente en la oración.

El domingo por la mañana se trabajó la amistad de Dios de manera individual y reflexiva, por lo que se les ofreció unas preguntas para responder y pensar sobre ellas. Después se les dio un crucigrama, y para terminar una carta personificada de Jesús. Tras esto se plantó la semilla, se regó y se puso al sol simbolizando la amistad del Señor, y la necesidad de cuidarla y vivirla. Para clausurar la convivencia, se celebró la Eucaristía, donde se pudo compartir todas aquellas vivencias que se habían experimentado durante el fin de semana.

Fue un fin de semana precioso, donde el Espíritu Santo se ha hecho presente en cada actividad y oración que se ha realizado, así como en los niños, catequistas, en las cocineras que ayudaron con la cocina y en Rubén, por lo que demos gracias a Dios por ello.