PARLAMENTOS DE LA JUVENTUD

Noticia del Boletín 101 – Año 3, del 8 de marzo de 2020

Hoy queremos aprovechar este hueco del boletín para informar sobre los Parlamentos de la Juventud que tuvieron lugar el pasado sábado, donde los participantes de las Vicarías 4ª y 5ª tuvieron un momento para compartir experiencias y dialogar sobre distintos temas relacionados con la actualidad.

Los parlamentos son una magnífica oportunidad para ampliar nuestros horizontes más allá de nuestra Parroquia y poder conocer a nuestros hermanos del resto de la vicaría. Darnos cuenta de lo grande que es nuestra familia y que a pesar de todo, cada uno de nosotros somos importantes. En esta ocasión, acudieron cerca de 200 personas, entre los cuales se encontraban varios jóvenes de Santa Eugenia. Fue un día cargado de Espíritu donde en distintas mesas se ofrecieron testimonios orientados a temas como la ecología, la sexualidad, la política o las vocaciones. Se compartieron experiencias de fe de todo tipo y posteriormente en grupos reducidos se pudo charlar tranquilamente para que todos los asistentes pudieran participar y dar su opinión.

Más tarde, después de recargar fuerzas con una comida en comunidad, se realizó un pleno para compartir lo que más había gustado por la mañana y se eligieron los representantes que más adelante acudirán a los parlamentos de toda la diócesis y, de esta forma, hacer llegar más lejos todo lo que se habló en este día.

Un año más, los parlamentos cumplieron su objetivo, que no es otro que el de darle valor a la vida personal de cada miembro de la Iglesia y así, a través del testimonio y del poder del Espíritu, reforzar los lazos de nuestra familia.

EJERCICIOS ESPIRITUALES

Noticia del Boletín 100 – Año 3, del 1 de marzo de 2020

Durante el pasado fin de semana tuvieron lugar los ejercicios espirituales de nuestra vicaría, un fin de semana destinado a la oración, el silencio y el encuentro con Jesús. Teniendo en cuenta la cercanía a la Cuaresma, fue un gran punto de partida en la preparación hacia esta, y por ello algunos de nuestros jóvenes se decidieron a participar.

En los ejercicios el silencio jugó un papel fundamental, y no sólo el silencio exterior, con el que algunos de los asistentes no tuvieron ningún problema, sino el silencio de la cabeza y el corazón, al que en muchas ocasiones no damos ninguna importancia pero resulta fundamental en el encuentro con Dios. Esta experiencia se desarrolló en silencio, con muchos espacios para la oración independiente y en comunidad, permitiendo profundizar más en nosotros mismos con el Padre.

A lo largo del fin de semana se trabajaron varias ideas que calaron muy hondo en nuestros jóvenes, con preguntas muy aplicables para todos nosotros también. Como fue el caso de dejarnos amar plenamente por Dios, en todos los aspectos de nuestra vida, para de esta forma poder dar un SÍ incondicional a Dios, un SÍ pleno y sin filtros, incluyendo aquello que a nosotros mismos nos cuesta amar.

Se habló también de la culpabilidad que sentimos al cometer un pecado, una culpa que no está incentivada por el Padre, sino que brota en nosotros por haber dañado una relación limpia y la añoranza por recuperar esa relación. Siempre desde la comprensión de Jesús, porque Él es como nosotros y nos comprende y ama, y esto lo podemos ver en la escena del Bautismo de Jesús. Donde baja a nuestro nivel de pecadores poniéndose a la cola para ser bautizado junto a nosotros para acompañarnos.

En resumen, resultó un fin de semana intenso y profundo, abierto a la escucha del Padre y de lo que tenía que decir a cada uno de nuestros jóvenes.